Menorca ha puesto broche de oro a una de las grandes citas del programa ‘Menorca Región Europea de Gastronomía 2022’
Como periodistas y escritores gastronómicos que generamos una influencia en el consumidor de restauración y alimentación en general, tanto desde medios escritos, como multimedia, redes sociales u otros nuevos formatos, nos comprometemos a respetar los siguientes principios éticos:
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Enriquecimiento cultural. La gastronomía es un elemento primordial de la cultura humana. Por este motivo, deseamos enriquecerla al máximo y generar conocimiento interdisciplinar.
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Libertad de opinión. La opinión será siempre libre y veraz. El ejercicio periodístico ético comporta transparencia. La crítica positiva no puede comprarse.
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Rigor analítico. Las opiniones publicadas o manifestadas se harán desde el máximo rigor según el método de cada uno, con el máximo respeto para los profesionales, sin que ello impida denunciar engaños o prácticas fraudulentas.
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Durabilidad social. Las condiciones laborales que favorezcan la conciliación, así como la integración en la diversidad funcional, serán objeto de repercusión positiva.
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Diversidad cultural. La visibilidad de las diferentes culturas y opciones alimentarias tendrá un tratamiento de respeto para ampliar los puntos de vista y el conocimiento.
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Durabilidad ambiental. El impacto de la gastronomía en el medio ambiente tendrá especial atención para valorar positivamente las opciones más sostenibles, así como también la necesidad evidente de reequilibrar nuestros hábitos alimentarios.
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Durabilidad económica. Los parámetros económicos de productores, artesanos y restauradores se tendrán muy en cuenta para ponen en valor su trabajo.
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Alimentación saludable. Los hábitos de alimentación saludables serán objeto de atención y difusión, siempre basados en datos que tengan un consenso amplio de la comunidad científica.
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Impacto local y en el equipo. Los productores y restauradores que tengan un impacto local especialmente positivo en la comunidad en la que trabajan tendrán una especial difusión. Los profesionales de la sala y el resto de los trabajadores implicados en el proceso tendrán siempre atención especial.
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Equidad. La visibilidad de los distintos géneros que trabajan en todos los ámbitos gastronómicos tendrá un tratamiento equitativo. Se intentará compensar el desequilibrio histórico con énfasis en las mujeres silenciadas.