Ditaly presenta su carta más picante

La colaboración entre Digitaly y Lelo, con el picante como hilo conductor explora las similitudes del placer que comparten el sexo y la comida

En nueve semanas y media, una de las películas eróticas más famosas de todos los tiempos, dos de los actores más conocidos de Hollywood en ese momento, Mickey Rourke y Kim Basinger, protagonizan una escena en la que se mezclan el sexo y la comida que ha quedado en la retina de todos los espectadores.

Ambos actores, utilizan todos los alimentos del refrigerador para dar placer al otro, las texturas, los olores y sabores, se convierten en una poderosa arma de seducción con la que excitar a la otra parte. Y es que, desde siempre, se ha asociado la comida y el sexo, puesto que las similitudes en cuanto a la recepción del placer son enormes. Según un estudio realizado por la marca de juguetería erótica de lujo y bienestar sexual Lelo, un 27% de la población asegura que en sus fantasías se entremezclan comida y sexo en armoniosa sintonía. Siguiendo esta premisa, Ditaly y Lelo han unido sus fuerzas en una colaboración especial en un viaje por los territorios comunes que comparten el sexo y la comida con el hilo conductor del picante.

Joaquín Velasco, director de I+D de Ditaly, ha creado una nueva carta picante compuesta por platos aptos para todos los públicos, pudiendo regular la intensidad con sus aceites de Jaén, elaborados directamente en el restaurante con ajo, cayena, romero o guindilla. Así, se encienden un poco los platos como las patatas rustidas a la calabresa o el siempre socorrido provolone, aumentando su intensidad e intensificando el placer. Los amantes de las sensaciones fuertes y de la pizza también están de enhorabuena, puesto que Ditaly ha creado la Fuoco del Vesubio o la Calzone Inferno, consiguiendo que el horno de leña no sea lo más ardiente de sus restaurantes. Un auténtico menú de dos rombos.

La nata o las fresas son dos de los alimentos más asociados al sexo, pero es el picante el que se lleva la fama de encender la llama de la pasión. Aunque no tiene sabor por sí mismo, provoca una reacción corporal similar a la que se siente al practicar deportes de riesgo, así, un 58% de la población afirma que probarían algo que saben que va a picar pero que no saben en qué medida, la adrenalina que se percibe que se va a sentir atrae poderosamente la curiosidad.

La carta de Ditaly presenta además otro tipo de propuestas como el il nostro vitello, con sus características alcaparras y el pimentón picante, consiguiendo acercar parte de la tradición de la región de Piamonte, de donde es originario el plato, a sus nueve restaurantes. Los embutidos italianos siempre son el acompañamiento perfecto cuando hablamos de gastronomía ítalo-mediterránea y opciones como la spianata picante pueden alargar la sensación de disfrute un poco más. Ante tanto fuego descontrolado en los paladares, la carta de coctelería puede ser el complemento perfecto para apaciguar las llamas. El Negroni Bianco chispeante de trago largo con su toque de yuzu o el Collins Italiano, tan refrescante en boca gracias a la bergamota.Desde Lelo, en base a su encuesta, lanzada en el mes de diciembre de 2022, han tenido en cuenta los resultados finales para esta colaboración puesto que el 44 % de las personas encuestadas prefieren el sexo a la comida. La colaboración con Ditaly es la excusa perfecta para fusionar ambos conceptos y comprender mejor la gastrosexología, un concepto originado en España que se encarga de descubrir y explicar los mecanismos psicológicos que genera el placer de cocinar o comer ciertos alimentos, entre ellos, la comida italiana en un amplio porcentaje.

Para Valérie Tasso, escritora y embajadora de Lelo, para disfrutar de ambos mundos, la comida y el sexo, es fundamental contar con buenos ingredientes para evitar que el resultado final sea soso o insípido. Así, tanto los masajeadores de clítoris NEA 3 o el Lily 3 de Lelo o los ingredientes italianos con denominación de origen de Ditaly, son un aditivo perfecto para hacer más picantes y apetecibles los encuentros sexuales.