Tiempo de lectura: 3 minutos
-
Un viaje por Asia es la propuesta que el empresario taiwanés Pedro Lee ofrece a través del buen hacer del chef ejecutivo el hongkonés Jianhong JIang donde no faltan clásicos los dim sum, los baos, el sushi, el wok y los poke bowls
Un viaje por Asia y por sus puestos de comida callejeros. Ésa es la propuesta que el empresario taiwanés Pedro Lee ha querido ofrecer con su nuevo proyecto, Misska, un restaurante concebido a modo de Asian street food en pleno centro financiero de Bilbao, en la calle Colón de Larreategui. El responsable de la primera apertura de un restaurante chino en España, concretamente en Bilbao, y propietario de espacios míticos en Madrid, como Café Saigón, ha querido resumir con Misska sus 45 años de trayectoria profesional en el mundo de la restauración haciendo un repaso por las principales cocinas asiáticas. “Existe una tendencia mundial en ciudades como Nueva York y Londres que apuesta por los puestos callejeros y desenfadados que pueden encontrarse en países como China, Taiwán o Tailandia. Hoy en día, la gente busca lugares divertidos en los que probar comida rica y a un precio accesible”, destaca Pedro Lee.
Con una cocina non stop desde las 13.00h hasta las 23.30h (y hasta las 00.00h los fines de semanas) y a la vista de los comensales, en la carta de Misska, ideada por el chef ejecutivo del Grupo Café Saigón, el hongkonés Jianhong JIang, no faltan platos imprescindibles, como los cantoneses dim sum, así como los baos, procedentes de Taiwán y que el restaurante presenta en su carta en platos como el bao de pato Pekín con Hoisi. A ellos se unirán nuevas recetas, como los pintxos chinos, un guiño a la cocina vasca. Además, y como novedad, Misska contará con terraza en primavera.
La gastronomía japonesa está representada en Misska con platos como el sushi, presentado en combos de diferentes tamaños y que incluyen niguiris y makis, así como en la sopa miso. Y de Tailandia, platos como los tallarines salteados al wok Pad Thai con langostinos, sopa ton yan cum y nos trasladan al exótico país.
China también está presente en Misska con woks, como el de pato caramelizado con semilla de sésamo o los dados de cerdo con salsa agridulce al estilo Pekín. La influencia hawaiana se refleja en los poke bowls de salmón y atún o en la opción vegana.
Y para los que después de esta aventura gastronómica, se queden con ganas de algo dulce, Misska ofrece en su carta propuestas tan sugerentes como el bao de crema, mochi de coco o los rollitos de chocolate con helado.
Por lo que respecta a la carta líquida, entre las cervezas destacan la Tiger, procedente de Singapur; la china Tsin Tao o la tailandesa Shingga. Y junto a ellas, los cócteles con nombres tan sugerentes como Lady Misska o Dragon Tatoo y que invitan a tomarse una copa.
En este viaje gastronómico y cultural, la decoración es protagonista. Como asegura José Arroyo, interiorista de Misska, “hemos querido mostrar un concepto urbanita que refleje el street food, el comer en la calle, tal y como se hace en todo Asia”.
Así, Misska es el reflejo de lo que puede ser un callejón de cualquier calle en Tailandia, China o Taiwán con iluminación de neones, pintadas en las paredes y símbolos que transportan al comensal al continente asiático. “Hemos querido aprovechar lo que el espacio nos ofrecía y hemos dejado que materiales como el hierro, el hormigón y el ladrillo cara vista sean los protagonistas”.
